El BMW X3 me ha demostrado que es un coche muy versátil, que va a cumplir con lo que podemos buscar en un SUV de gama alta, tanto en el día a día, como realizando viajes por carretera.
Aunque el BMW X3 sea un SUV y un coche pensado para la carretera, y para el día a día, cabe mencionar que también puede cumplir bastante bien fuera del asfalto.
Lo que más me gusta del BMW X3, y el factor diferencial frente a su competencia, es que a pesar de su altura y su tamaño es un coche muy ágil, incluso divertido, que conserva la conducción deportiva que uno espera de un BMW y que no está tan lejos de lo que se puede disfrutar en una berlina de BMW.
Me parece muy interesante que el BMW X3 también esté disponible con motores microhíbridos y etiqueta ECO en toda la gama, salvo en las versiones M; y con una mecánica híbrida y enchufable; así como una versión eléctrica iX3, cuya autonomía podría ser mejorable, pero que me ha gustado mucho por su rendimiento, agilidad, y prestaciones.
He tenido ocasión de conducir también la versión más deportiva el BMW X3 M, que con 480 CV y 510 CV en su versión Competition ofrece unas prestaciones descomunales, que uno no se espera de un coche de su tamaño.
David Villarreal
3,8
Excelente comportamiento y mecánicas solventes
Gama de motores, tacto de conducción, versatilidad