El MINI Cabrio es, según mi opinión, el descapotable pequeño más divertido que podemos comprar con más de dos plazas. Es un coche muy compacto, muy práctico para el día a día y aunque su espacio es limitado, por su tamaño y su sistema de capota, es un coche muy recomendable para la ciudad.
Lo que más me gusta del MINI Cabrio es su tacto de conducción que, a pesar de su tamaño, sigue siendo el de un kart grande, así como el gusto por el detalle de MINI, en los rasgos exteriores, pero también en el diseño de un habitáculo en el que nos ha hecho disfrutar mucho. El rendimiento de sus motores de gasolina es más que correcto y dispone de una versión John Cooper Works de 231 CV que cubre las necesidades de aquellos que buscan un descapotable muy deportivo. Se echa de menos una versión diésel, que cubriría las necesidades del conductor que requiera recorrer muchos kilómetros y también una versión eléctrica que no está disponible en el Cabrio, pero sí en el MINI de 3 puertas.
Me ha gustado que MINI te permita personalizar, hasta el último detalle, tu coche, pero no tanto que eso siempre tenga un coste bastante alto, que pueda hacer que su precio se eleve significativamente.
David Villarreal
3,6
Cuatro plazas y un techo de lona eléctrico que se pliega en pocos segundos son sus claves