Opinión de nuestro experto sobre el Mitsubishi L200
El Mitsubishi L200 es un coche puramente enfocado para el campo gracias a sus capacidades off-road y a su condición de pick-up. Además, cuenta con un diseño más fresco y depurado que algunos de sus rivales, algo que se complementa con unos buenos acabados interiores y una tecnología más que suficiente.
Es un coche en que en cualquier terreno que no sea el suyo se siente incómodo. Es decir, circular con el L200 por ciudad es una tarea tediosa debido a sus grandes dimensiones y tosco comportamiento en general, aunque en su defensa he decir que es bastante más cómodo que muchos de sus rivales.
En autopista el ruido aerodinámico no es tan acusado como en otros pick-up, pero los vaivenes de la carrocería son notables, dejando patente que ese no es su territorio. Eso por ello que me ha parecido un coche relativamente confortable en autopista pese a ser un pick-up, que adolecen en dinámica por su chasis de largueros y travesaños y por sus suspensiones de tipo ballesta.
Fuera del asfalto nos topamos con una capacidad propia de su segmento con una buena motricidad dispuesta a ayudarnos a salir airosos de numerosos aprietos. Sin embargo, su punto débil lo encontramos en sus ángulos, que pueden hacernos rozar en según que circunstancias.
Una perfecta combinación entre aptitudes off-road y confort de marcha